el domingo, cuando se fue el sol, empecé a oir un zumbido... como cuando oyes de lejos un avión, o una tormenta... el zumbido se fue convirtiendo en algo ensordecedor... un zumbido oscuro que por un lado me hacía temblar (como cuando oyes a un bombardero de lejos y te da miedo que la bomba te caiga encima -- lo digo como si hubiera vivido épocas de guerra)... un zumbido que nació en el mar... se iba acercando, empecé a sentir sus vibraciones además de su sonido... me empezó a vibrar el cuerpo, por dentro... ¿qué era? que desconcierto, ¿qué es lo que provocaba ese zumbido vibrante? lo que imaginaba... eran las dos espirales, se distanciaron, se tomaron unas vacaciones, pero su magnetismo las estaba volviendo a hacer que se acercaran... viajaban cada una hacia la otra con una velocidad que asustaba... su objetivo era claro, chocar entre ellas... una iba de este a oeste, y la otra de oeste a este... hacia el mismo punto... yo, por un momento, pensé, no sé porqué carajos, que pasarían de largo... que modificarían sus trayectorias pero no lo suficiente como para que la atracción las hiciera colisionar...
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la colisión se avecinaba... se cruzaron y no dudaron ni un segundo... una a por la otra, la otra a por la una... desencadenando una serie infinita de gritos, miradas, ruidos, caricias, dolores, llantos, risas, abrazos, incomprensiones, equilibrios, malabarismos, pasiones sin descripción, deseo, y más deseo... creo que no hay nada mejor que reuna todo este tipo de pensasentimientos que el amor... pues eso fue... el amor las hizo colisionar, y el zumbido ensordecedor se convirtió en un silencio de sueños entrelazados, y calores sentidos por las pieles esa noche...
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espirales... desearía que vuestras velocidades se redujeran un poco para que los alejamientos/acercamientos tuvieran menos fuerza centrífuga... o mejor, que esa fuerza centrífuga la notara tan solo cuando las dos espirales se acercan...
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julia centrifugando.
1 comentario:
desviarse de un camino recto a uno circular,
fuerza centrípeta
fuerza centrífuga
estrellas inmóviles
Imaginemos un universo con solo dos objetos ma y mb separados una distancia r, esta situación es claramente irreal, sin embargo, podemos imaginarla. Estas dos masas, en principio, sufrirían una atracción gravitatoria que podría ser observada al medir la distancia r, sin embargo, el sistema, si las dos masas rotan alrededor de su centro de masas con un momento angular tal que compense la fuerza gravitatoria, parecería equivalente e indistinguible de un sistema en el que no existiese la fuerza gravitatoria y no rotaran o de un sistema en que uno solo de los cuerpos sufriera una rotación interna. El principio de Mach dice que una rotación en este sistema no podría ser observada si no existiera un fondo de estrellas fijas.
la rubia se choca y genera polvo de estrellas
ayer te vi iluminada
resplandecías
no se si los impactos, no se si porque eres rubia,
lele lerele
pa que el amor nunca más se pierda
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